22.11.17

Telegrama a la muerte

Muerte,
(¿Debería escribir "estimada" o "querida"? No lo sé, porque a decir verdad, todos hablamos mucho de vos, pero no te conocemos aún.)

Te escribo un telegrama porque no quiero perder demasiado tiempo en la vida. Ya tendremos oportunidad de hablar más.

Simplemente quiero que sepas que tenés mala fama. Tu opuesta, la vida, es realmente muy bonita. Creo que tendrás que esforzarte mucho por superar a la vida, porque nos quejamos de que cuesta (ingratos humanos) y sin embargo, todos queremos vivirla.

¿Podrás acaso darnos algo como lo que la vida nos da? Familia, paisajes, amigos, abrazos, amor, reconciliaciones, adrenalina, bellezas. Sí, ya sé que hay cosas malas también. Pero por cada mala, me gusta pensar en tres buenas.

No sé cuándo llegarás, si seguiremos conociéndote uno a uno, o si, de repente, este globo terrestre no resistirá que sigamos inflándolo de gases tóxicos. Más allá de cuándo sea que llegues, deseo que realmente tengas algo lindo para ofrecer. Así como la vida. Solo eso.

Ojalá, antes de que llegues a todos o a cada uno, aprendamos a vivir antes que a morir. A vivir sin buscar respuestas a preguntas que no las tienen, porque si no las tienen, se parecen más a afirmaciones que a interrogaciones. Las preguntas sin respuestas son hechos. Hechos como vos… y en la vida solo debería alcanzarnos con vivir.

Entonces, nos vemos cuando vengas.
Un hombre.

No hay comentarios.: