23.6.13

buscar que los sueños nos encuentren

A los sueños hay que salir a buscarlos porque siempre andan por ahí, un tanto desorientados. Hoy me lo dijo al oído un fantasma y yo le creí.

Esta mañana me desperté algo cansada ¿Pero es que acaso es posible despertarse cansado? Cuando los ojos están cerrados, cuando una parte del cuerpo se durmió, a veces despiertan los fantasmas del inconsciente que salen a festejar que al menos en algún lugar, aún así ocultos y en silencio en los rincones más insólitos de una mente amaestrada, ellos siguen vivos. Y esos fantasmas juegan, cantan, disfrutan, dibujan, escriben, bailan, pintan, crean, creen que quizás con tanto alboroto podrán despertar la mente en la que son inquilinos. Inquilinos, eso es, ellos quieren ser dueños y no inquilinos.

Anoche mis fantasmas no me dejaron dormir. Ni los míos que escribían, que leían, que estaba filmando una película, que actuaban sobre tablas, que escapaban de las quejas, que no escuchaban los (pre)juicios, que simplemente eran. Esos fantasmas, los míos, no me dejaron dormir. Y tampoco aquellos del hombre que duerme a mi lado. Los suyos cantaban, creaban ritmos, bailaban, convertían penales en goles, alentaban a la tribuna, le daban una razón a esa hinchada para estar viva, para tanta pasión.

Anoche mis fantasmas y los de mi compañero no me dejaron dormir y hoy me levanté cansada, con un susurro al oído, un cuchicheo que fue una certeza: a los sueños hay que salir a buscarlos porque siempre andan por ahí, un tanto desorientados. Los sueños no llegan porque sí, esos deseos más genuinos que no son otra cosa que placeres, egoístamente placeres para uno y quizás si a los otros les quedan sueños por conquistar, también podrán disfrutar de las migajas, esos sueños, exclusivamente únicos, no llegan porque sí, no aparecen de repente, hay que salir a buscarlos, convencerlos de que no podríamos vivir mejor de otra manera si no es con ellos y después, sostenerlos para que jamás se nos vayan de las ganas.

Hoy me lo dijo un fantasma y yo le creí, entonces salí afuera a buscar que los sueños me encuentren, esos dormidos que me habitan mientras aparento descansar. Quiero buscarle una razón a ese fantasma, una razón para existir, porque en su razón habita la mía.

También en: http://bit.ly/1a5p0MJ

No hay comentarios.: